Nuestro compañero Juan Valentín Fernández de la Gala, Pr. 79, nos hace llegar la crónica del acto homenaje a Teilhard de Chardin en El Puerto de Santa María celebrado hace unos días. Una cita destacada por celebrarse en la ciudad donde reside, además de por tratarse de un ámbito al que dedica horas, días y momentos de trabajo y estudio imposibles de contabilizar. Una parada en el programa que lleva este evento por distintos puntos del panorama internacional como en Mallorca, Zaragoza, Valladolid, Austin (Texas) y Pekín. Aunque también Juan Valentín suma citas teilhardianas en otros puntos del país, esta vez sin acompañamiento musical pero sí centradas en la figura de este jesuita reconocido mundialmente.
«En torno a 200 asistentes participaron en la cita en la que Mercè Prats, de la Fundación Teilhard de París, proyectó tres documentales mudos de los años 30 que muestran el trabajo paleontológico de Teilhard en China y los acompañó con música al piano de Claude Debussy y Federico Mompou.
Fue una tarde de especial recuerdo para el jesuita y paleontólogo Pierre Teilhard de Chardin, que supo desenterrar la vida y la cultura humana escondida en los estratos paleolíticos de China. Nos ayudó a los católicos a incorporar sin traumas la idea evolutiva en nuestra concepción del mundo y nos enseñó un camino místico que era capaz de percibir la viva presencia de Dios en la materia y en el mundo natural.
Mercè Prats, historiadora de sensatez, pianista de éxito y experta en la vida y la obra de Teilhard, nos mostró unas imágenes de cine mudo de los años 30 sobre el trabajo de campo de Teilhard en China y las depositó suavemente, como en un sueño, sobre el lecho amable de la música de Debussy y Mompou.
Fue una experiencia estimulante, reveladora y profundamente esperanzada.
¡Moltes gràcies, Mercè! ¡Bemvinguda!
Más información sobre esta cita pinchando en este enlace a la revista Vida Nueva_Theilard
A esta crónica añadimos la satisfacción personal de nuestro compañero, puesto que «nunca hubiera imaginado que un dramaturgo español como José Luis Alonso de Santos, al que tanto admiro y del que tanto he aprendido y disfrutado, viniera, amablemente, a pedirme que le dedicara el libro de François Euvé sobre Teilhard, en el que mi único mérito es haber escrito un modesto y balbuciente prólogo».
Alonso de Santos ha sido director de la Real Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid y de la Compañía Nacional de Teatro Clásico y presidente de la Academia de las Artes Escénicas de España. «Bajarse al moro», «La estanquera de Vallecas» y «Viva el duque, nuestro dueño» son, entre otras muchas, tres de sus obras que han quedado, ya para siempre, en la historia del teatro español.
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