«Contigo somos +» celebraba a comienzos de este mes de marzo “lo que nos une como comunidad MAG+S”, con la intención de conocer también “lo que nuestros compañeros están viviendo en los distintos lugares donde MAG+S vive”. Así se presentaba un evento a lo grande, “MACRO porque convocamos a TODOS los jóvenes MAG+S de España, jóvenes 18-30 años vinculados a la Red MAG+S sea por su pertenencia en grupos o comunidades ignacianas; sea por su participación en alguna experiencia o actividad MAG+S o por cualquier otra vinculación”.

Desde que MAG+S se creó tenían muchas ganas de convocar esta cita y “de liarla», en un encuentro entre todos los jóvenes ignacianos de España. Allí estuvo Francisco González Siñuela, antiguo alumno de la Promoción 2018 de nuestro Colegio San José, que nos ha contado en estas líneas su experiencia:

“Al principio fue un poco locura, ya que me apunté yo solo del Colegio de Villafranca, solo conocía a unos cuantos de Sevilla, pero quizás sin esa locura esto no hubiera sido posible, sin la locura de un grupos de jóvenes de la pastoral Magis que se atrevieron a soñar a lo grande, unos locos por Cristo Jesús que han hecho posible una de las mejores experiencias para mí vividas.

Por otra parte, este primer Macroencuentro ha sido un reto de autenticidad, de aterrizar y de conectar con mi vida, ya que desde que he comenzado mis estudios universitarios, no he dejado de lado a Dios (voy a misa casi todos los domingos y por las noches tengo un ratito de oración), pero no tengo la misma relación que antes tenía gracias a la Pastoral del Colegio y de la que ahora no puedo disfrutar porque donde realizo mis estudios no hay ningún grupo.

Ha sido un encuentro de disponibilidad, de remover el espíritu Magis, de tener una fe viva, de buscar a Dios en todos los sitios, como fue mi actividad del sábado por la mañana, en la cual debía de ir realizando el camino de Emaús con una chica que conocí allí en el Macroencuentro y a la vez ir realizando fotografías de las cosas en las que veíamos a Dios, cosas tan simples como el ir a hacer la compra un matrimonio juntos y que el marido ayude a su mujer, o un indigente que esté pidiendo en la calle y te regale una sonrisa cuando quizás no la tenga ni para él.

Y para finalizar, ha sido un Macroencuentro de unión, como es la relación con los jesuitas, que pese a que las distancias sean muy largas, ellos siempre van a estar cuidando de la unión y de la fraternidad de los que han compartido vida con ellos”.